De sistemas operativos y nuevos programas.

El sábado pasado Robert trabajo todo el día, me sentí como perrito sin dueño, ya que a ultimas fechas hemos pasado muchisimo más tiempo juntos, pero como ya sabía que iba a estar la jornada así hice planes, mi papá fue a recogernos (a Fernanda, Natalia y a mi) como a las nueve, fuimos por Yazmin y por mi mamá y nos fuimos a almorzar, después de tiendas y finalmente a la casa de mis papás, hacía mucho tiempo que no pasaba tantas horas con mi familia (sin mi marido), tuve una regresión, es increíble todo lo que he(mos) cambiado en solo un par de años.

Admiro, sinceramente, la relación de respeto y amor que han tenido mis papás durante más de 33 años de matrimonio (más 5 de noviazgo), sorteando todos los inconvenientes que han tenido que vivir a lo largo de este tiempo, pero cada familia tiene su dínamica, y ésta se ve definitivamente alterada cuando ya no vives bajo el mismo techo, por lo que, inexplicablemente situaciones tan cotidianas se me hacieron inexplicables, actitudes de siempre fueron casi milagrosas ante mis ojos, de pronto me vi inmersa por un día de nuevo en mi vida de soltera, y comprendí que esos cambios imperceptibles, por que se van dando día a día, son los que van reforzando tu personalidad, fue como querer vivir de nuevo en casa, como querer correr una versión actualizada de un programa en una compu con sistema operativo viejo, corre, pero no corre bien, así me sentía, como inhibida.

Amo a mis papás, amo a mis hermanas, y es totalmente real, pero cuando llegue a mi casa y oí el silencio, sonreí, más tarde llego mi marido, y la ecuación estaba completa, el programa corría con el sistema operativo adecuado. Estoy conciente de que cuando Paulina, mi hija, nazca la ecuación cambiará de nueva cuenta, ya que se incluirá una nueva variable, pero asi es la vida, y la acepto y me encanta el dinamismo en el que vivimos, es solo que hay días, como el sábado, en que por alguna razón vuelves al escenario de ayer, pero con la mentalidad de hoy y como que hace shock.

Sean felices.